Siempre intuí presencia angelical en mi vida,
mano invisible que dotaba a mi alma
de cuanto necesitaba para su crecimiento
para su calma....
supieron cruzar en mi camino
libros, echos, gentes
que enriquecieron mi mente con atino.
Momentos hubo en que sin hayar motivos
tentada estuve de abandonar,
cansada de tanto desvarío
de volcar todo mi cariño
en pozos vacíos.
Pero siempre me aferre
a una pequeña esperanza
por débil que pareciese,
que obligada estaba
a vivir lo que viniese.
No es opción dejar este mundo
cuando nos defrauda, y nos duele
mucho hay por descubrir del otro lado
que vetado esta a los que en este estamos.
para conocer hay que morir
y siempre me negué a hacerlo,
así que de la vida aprendí
cuan de poco comprendí
de magia y misterios....
quizá llego ese momento
en que aniquilarme deba
impaciente por volar
deje mi mundo y desaparezca...
No hay comentarios:
Publicar un comentario